En Aitana llevamos desde 1983 trabajando para ayudar a nuestros clientes a alcanzar el éxito en sus negocios. Desde entonces no hemos parado de innovar y de aplicar las últimas tecnologías a nuestros clientes para ayudarles a crecer.

Apostamos por la nube desde el año 2010, siendo el primer partner de Microsoft en España en implantarla en nuestros clientes.

Hoy en día seguimos siendo pioneros en este aspecto, con una sólida base de conocimiento en proyectos en la nube.

Si buscas un compañero para subir a la nube, Aitana seguro que es el adecuado.

El concepto básico que introduce la nube es el de poder almacenar los archivos y programas informáticos en diversos servidores que se alojan en la Red. Se pueden guardar y abrir y es posible trabajar con ellos en la medida en que se necesite y desde cualquier equipo, lugar y horario. Esta tecnología también se conoce como cloud computing, en inglés, y es una las tendencias que más se difunde en los sectores que trabajan con tecnologías de la información.

La plataforma como servicio (PaaS) de capa media alberga en su panel las herramientas para el desarrollo del software, las cuales se alojan en la nube y son accesibles desde un navegador web. Acciones como el desarrollo, el testeo, la documentación, el análisis o la construcción de entornos operativos, que llevan a cabo con frecuencia los desarrolladores, pueden ponerse en marcha a través de aplicaciones en un único proceso. Tampoco es necesaria la instalación de herramientas adicionales. Con PaaS se encapsula, en un ambiente que permite el desarrollo de aplicaciones, y se empaqueta un grupo de complementos (también podría tratarse de módulos) que, por lo general, van a proporcionar un tipo de funcionalidad de sistema horizontal: datos persistentes, formas de autenticarse para el cliente, programas de mensajería, etc.

El modelo PaaS, como un entorno que contiene un volumen básico de sistemas, y otros componentes o APIs (configurados y preparados para su integración) dependen, para su funcionamiento ordinario, de una tecnología de desarrollo. Las distintas ofertas que se abren a la contratación van a poder estar en servicio durante todas las fases que dure el ciclo de desarrollo del software. Otra función que ofrecerían es especializarse en un área particular, como, por ejemplo, administrar el contenido.

Con un entorno basado en la nube, se cuenta con todo lo necesario para apoyar el ciclo de vida completo (de la construcción a la entrega de aplicaciones), sin incurrir en gastos mayores, como la compra del hardware subyacente, software, aprovisionamiento y alojamiento, y evitando la complejidad de su gestión. Se observan los beneficios para el desarrollo de las aplicaciones y llegar al mercado más rápidamente, la capacidad para implementar nuevas aplicaciones web a la nube en minutos y la reducción de procesos más difíciles con el middleware como servicio.

Ejemplos de tipo comercial van a incluir la App Engine de Google en una plataforma cloud para la ejecución de aplicaciones y su desarrollo como Java, PHP o NET. Se permite una gran flexibilidad en los servicios PaaS, por lo que pueden tener restricciones a partir de las capacidades de las que se disponga mediante el proveedor que se encarga de gestionar la solución ofrecida. En esta modalidad, el usuario puede llegar a desarrollar sus propias aplicaciones y tener un control sobre ellas, para lo cual se le ha ofrecido previamente una plataforma de desarrollo en la que tiene habilitadas las herramientas de programación necesarias. Escapa, no obstante, de su control la infraestructura, como se había mencionado.

La infraestructura como servicio (IaaS) es una modalidad de capa o nivel inferior que se distribuye normalmente a través de la virtualización de sistemas. No se compran servidores ni tampoco espacio para el almacenamiento en un CPD o hardware ni se presume de poder equipar los componentes de red. Todas esas funcionalidades son adquiridas por los clientes a terceros, un servicio externo.

Se están proporcionando a las empresas los recursos de computación, que incluyen servidores, componentes para redes y espacio de almacenamiento en el centro de datos desde una base de pago por utilización. Se verifican claramente algunos beneficios, como que las empresas no van a necesitar invertir en su propio hardware, sino que podrán escalar de infraestructura bajo demanda hasta soportar sin problemas las cargas de trabajo más dinámicas y será posible una innovación más flexible.

En IaaS, el proveedor se hace cargo de la gestión de los recursos físicos y los usuarios son los responsables de la plataforma adoptada. La finalidad primordial es la de poder entregar al cliente un servicio estándar de red, con almacenamiento y capacidades de cómputo básicos. El ejemplo más claro de servicio IaaS lo tendríamos en Microsoft Azure, con el que cada cliente puede construir una plataforma totalmente personalizada.

Seguridad en la nube

Este es uno de los aspectos que más preocupa a las empresas.  Preguntas como: ¿puede alguien acceder a los datos? ¿Dónde se almacenan las copias de seguridad? Hasta hace unos años, esto se traducía en empresas reticentes a subir a la nube. Hoy en día, las cosas en materia de tecnología han evolucionado y las compañías que no pueden proteger por sí mismas los datos como deberían deciden contratar un proveedor cloud que sí les pueda asegurar ese nivel de protección que la empresa, de otra manera, no conseguiría.

En el capítulo de seguridad, en materia de cloud computing, es resaltable que tiene posibilidades de control para ser tan válida como en los sistemas informáticos tradicionales; pero, cuando se habla de datos, se establece un matiz de confidencialidad. Los proveedores de servicio proporcionan a sus clientes los recursos suficientes para atajar y contrarrestar cualquier problema de seguridad que pudiera surgir. Es lo que sucede en Azure de Microsoft, en el que se ocupan de algunos aspectos fundamentales, como administración y control del acceso de identidades y usuarios, cifrado de comunicaciones y procesos de operaciones, protección de redes y la administración de amenazas.

Guardar los datos en la nube aporta un plus de fiabilidad. Será, incluso, más importante la velocidad con la que se podrán recuperar los datos ante cualquier desastre que se pueda sufrir. El hecho de reservar una copia de seguridad on cloud de los datos permitirá recuperarlos casi al instante y garantizar la supervivencia de áreas vitales de negocio.

La transmisión de archivos se hace de forma confiable al integrar backups de respaldo con cifrado antes de que se exporten al CPD, donde permanecerán bajo este sistema de encriptación. Solo el cliente podrá conocer la clave de seguridad para descifrarlos y estarán replicados en varios puntos geográficos distintos para su conservación y a salvo de bloqueos intempestivos.

Seguridad en la nube

Cuando se habla de globalización, indefectiblemente cabe aludir a los avances que la internetización ha causado en la sociedad. Todo pasa por la inmediatez, la hiperconectividad y una alta competencia. Los comparadores exponen las diferencias y filtran precios y calidades para regocijo del consumidor, que aprovecha más que nunca las oportunidades.

Las empresas deben adaptarse a esa realidad, un escaparate siempre abierto y disponible durante 24 horas del día y 365 días del año. Esto implica una transferencia de recursos, adaptar la estructura y los sistemas de trabajo. El cliente quiere sentirse importante y sus valoraciones pueden ser vitales para el crecimiento de la organización, pero también una mala crítica puede espantar a otros y hundirla. Las redes sociales hacen de altavoces y viralizan los contenidos y las opiniones hasta límites insospechados. Una campaña de marketing puede ser exitosa, si se posiciona adecuadamente y tiene a los influencers de cara.

El 70% de los usuarios utiliza un dispositivo móvil, por lo que adaptar la web es tan importante como invertir en la creación de una aplicación específica y disponible en las distintas plataformas que existen. Es importante cuidar la imagen de marca y resolver un conflicto para evitar que acabe en polémica, así como para mantener un grado de reputación sano. Bien enfocado, el multicanal es una gran plataforma de ventas, que permite, por un lado, recibir el feedback y conocer los gustos y costumbres de los usuarios mediante el Big Data, y, por otro, usar las herramientas del inbound marketing que fidelicen a los clientes. Con Dynamics NAV se obtiene una solución completa para la gestión empresarial, que permitirá a sus usuarios un trabajo más rápido y eficaz.

Sin duda, las empresas necesitan adaptarse a los medios digitales y, para empezar, pueden disfrutar de los importantes beneficios de usar la nube: acceso en cualquier momento y con cualquier dispositivo, todo el software accesible y actualizado, ahorro en software y hardware, sencillez de mantenimiento de los equipos de usuario y servidores, escalabilidad o facilidad de responder a necesidades más exigentes…